Por motivos de seguridad nacional, Pakistán confirma el cierre de la red social X

En una decisión que ha generado un intenso debate sobre la libertad de expresión, las autoridades de Pakistán han confirmado el cierre de la red social X, anteriormente conocida como Twitter. Este anuncio sigue a un bloqueo temporal anunciado en febrero, después de que el partido del ex primer ministro Imran Jan convocara protestas en todo el país contra un presunto fraude electoral.

Los usuarios de X han enfrentado dificultades para acceder a la plataforma desde febrero, y ahora el Ministerio del Interior paquistaní ha confirmado oficialmente el cierre en un documento presentado ante la Justicia. Se acusa a X de no cumplir con las directivas legales del gobierno y de evitar abordar las preocupaciones sobre el uso indebido de la plataforma, lo que habría llevado a su prohibición.

El Ministerio del Interior argumenta que la empresa se ha mostrado reacia a cooperar con las autoridades para abordar los problemas relacionados con el uso de la red social, lo que, según ellos, justifica la decisión de prohibirla en interés de la seguridad nacional y el mantenimiento del orden público.

Sin embargo, el Tribunal Superior de la región de Sind ha criticado esta medida y ha ordenado al Gobierno que restablezca el servicio en una semana. Organizaciones de derechos humanos y asociaciones de periodistas han condenado lo que consideran una “mordaza” a la libertad de expresión, mientras que los proveedores de servicios de Internet lamentan las pérdidas debido a las interrupciones.

La comunidad internacional también ha reaccionado, con países como Estados Unidos condenando la medida y pidiendo a Pakistán que levante las restricciones a las plataformas de redes sociales.

El cierre de X en Pakistán plantea importantes preguntas sobre la libertad de expresión en el país y sobre el papel de las redes sociales en la democracia. Mientras tanto, los ciudadanos y defensores de los derechos digitales continúan monitoreando la situación de cerca en un clima de incertidumbre sobre el futuro de la libertad en línea en Pakistán.